miércoles, 1 de abril de 2009

EMPIEZA MI HISTORIA


NACIMIENTO PAPA Y MAMA CONMIGO EN VALENCIA

Nací el 31 de mayo del año 1937, fue un año y un mes muy conflictivo, y de hecho toda mi vida se vio influenciada por este mes y este año. El año 37 fue el primero después de que los generales felones decidieran acabar con la segunda República, apoyados por la Iglesia, los terratenientes y las derechas internacionales, el apoyo de los fascismos Europeos fue fundamental para preparar el golpe que acabo con nuestras libertades y con tantas vidas, los desaparecidos que llenan aun las cunetas de este país son testigos de la barbarie insana de estos rebeldes sin entrañas.

El mes de mayo también fue sangriento, en Barcelona, que vio el enfrentamiento entre anarquistas y seguidores del POUM con los comunistas que apoyaban al gobierno.

Los anarquistas fueron los que impidieron la sublevación en Barcelona, heroicos, con sus manos desnudas se enfrentaron a los fascistas catalanes en la calle, fueron ellos los que arrebataron el cuartel de las Atarazanas, nido de golpistas, donde los militaras preparaban la toma de la ciudad. En estos combates murió Ascaso, anarquista de la CNT y la FAI, compañero y amigo de Durruti y de mi suegro Jerónimo Riera, de la FAI Asturiana.

Una vez el golpismo decapitado los ganadores que controlaban la ciudad ofrecieron el poder a la Generalidad catalana, su presidente les pidió que ocuparan un puesto en el gobierno catalán Eran anarquistas y el poder no les convenía, dijeron que mandaran ellos y no aceptaron ningún cargo en la Generalita. Con las armas arrancadas de las manos fascistas formaron la Columna de Hierro y fueron a liberar las tierras aragonesas.

El partido comunista nunca tuvo mucha influencia antes de la sublevación, tenia militantes, pero en numero reducido. La ayuda de la Unión Soviética a la república española les hizo crecer e implantarse por toda la zona republicana. Eran militantes disciplinados y combatientes heroicos, nadie puede dudarlo, pero lo que paso en Barcelona venia de su obediencia hacia Stalin. En esa época se perseguía al trotskismo con saña, no tardaría mucho su líder en ser asesinado en México por un comunista, pero la orden de exterminio era general, se ha escrito mucho sobre estas persecuciones y para entenderlas no se pueden separar de su contexto histórico, que hay que estudiar y comprender.

El POUM, aunque no lo era, fue considerado como trotskista, precisamente Troski había negado su apoyo a sus dirigentes diciéndoles que el verdadero proletariado estaba con la CNT y que había que apoyar a este sindicato. La orden fue dada por Moscú de acabar con el POUM, había que hacerles pasar por fascistas infiltrados en el mundo obrero y así se hizo, persecuciones, asesinatos, torturas y enfrentamientos se generalizaron, la CNT apoyo al POUM,se dieron cuenta de que después del exterminio de esa organización serian los próximos a sufrir los ataques comunistas.

El mes de mayo del 37 Barcelona vivió una batalla campal entre comunistas y anarquistas, el gobierno apoyó a los comunistas y los anarquistas perdieron el poder que ganaron con las armas contra los golpistas, pero que no quisieron ejercer.

La polémica se centraba también en el eterno problema que aun hoy día se discute, había que hacer la guerra o la revolución. Para enfrentarse a un ejercito regular y disciplinado como era el de los generales felones, si, se necesitaba un ejercito fuerte y bien armado, que pudiera plantar cara al fascismo internacional que ayudaba a los rebeldes mientras las potencias hacían la vista gorda dirigidas por la pérfida Albión, que apoyaba cuanto podía a los asesinos de democracia, mas tarde recibiría en su territorio las bombas de los aliados nazis de Franco.

Un ejército no puede ser eficaz sin disciplina, pero muchos fueron a defender la República llevados de un idealismo libertario que excluía jefes, órdenes y obediencia, también era cierto que lo que hacia que se enfrentaran con los enemigos era la utopía de una revolución que creían cercana, la pérdida de sus ilusiones hizo que muchos se retiraron de la contienda, cuando los franquistas entraron en Barcelona había anarquistas en prisión debido a su negativa a incorporarse a un ejército que ya no sentían como suyo. Afortunadamente las prisiones se abrieron y pudieron unirse a la Retirada, yo conocí algunos de ellos en Paris.

En Madrid el trágico enfrentamiento entre unos y otros fue mortal para los comunistas, la Junta Casado entregó la capital a las hordas franquistas, los comunistas se oponían y fueron encarcelados por los partidarios de la Junta, entre los que se contaban los anarquistas, y de su prisión no salieron más que para ser fusilados. Los anarquistas y los participantes de la Junta también fueron masacrados por los asesinos que gobernaron 40 años.

Si hablo de estos acontecimientos con relación a mi vida es porque el enfrentamiento entre republicanos genero heridas que aun hoy en día sangran y que han ensombrecido nuestra lucha anti-franquista.

Hace años, poco antes de la muerte del dictador, hablando con un amigo comunista le pregunté lo que pensaba del asesinato de Nin y de las consignas para convertirle en aliado de los fascistas, el euro-comunismo había llegado al PCE y se podía hablar con más libertad.

Mira Milagros, me dijo, yo no supe nada de este asunto, ya sabes que por esas fechas era un simple soldado del Quinto Regimiento, pero te diré que si el Partido me hubiera dicho que era un fascista y que había que acabar con él, lo hubiera hecho, yo y cualquiera de mis camaradas, ninguno discutíamos las ordenes del Partido en el que creímos ciegamente. Tenía razón, no había mas que decir, así era y así será mientras los fanatismos perduren.


Para llegar al momento deseado de mi nacimiento es preciso contar el porque me pusieron de patitas en un mundo que siempre me ha asombrado, que sigo sin entender y al que he renunciado a cambiar. Esto último es una prueba de que a los 70 años y pico ya voy camino de ser adulta.

Poco antes de que se declarara el conflicto mi abuelo Juan Tejon, que tenía una academia de preparación para las oposiciones de Hacienda, tuvo dos alumnos muy interesantes para mi, se trataba de Milagros y Enrique, mis padres, Mi abuelo era por entonces jefe de contabilidad en el Ministerio de Hacienda y eso hacia que sus clases fueran muy concurridas.

Mi abuelo paterno, militar de carrera, como ya he contado, tuvo varios hijos, los iremos encontrando, Los militares no cobraban sueldos enormes y la cantidad de hijos que tenían hacia que no siempre podían pagarles estudios, mi padre contaba que él se puso a trabajar a los 16 años para pagarse los estudios, así que decidió ser funcionario y frecuentó la academia donde le esperaba el amor, seguramente Enrique y Milagros se amaron en esos tiempos revueltos, incluso he visto algún verso que él le dedicó, fueron unos amores que acabaron mal, yo nací de ellos.

Mi abuelo materno, Don Juan Tejon y Baquera, al estallar la contienda era segundo secretario del Partido Socialista Valenciano, pertenecía a la tendencia de Largo Caballero, los mas revolucionarios y él apoyo las huelgas revolucionarias de Asturias del 34 que fueron reprimidas con ferocidad por el General Franco enviado allí con los moros del ejercito de África, y que causaron crímenes enormes para reprimir a los mineros, fue como un prólogo de la contienda. Se da el hecho curioso para mi de que mi suegro Jerónimo Riera fue uno de los que lucharon con los mineros y tuvo que refugiarse en Francia por estos hechos, se fue a Limoges, allí donde su hijo se refugiaría mas tarde.

Mi abuelo era in dirigente importante, y como tal daba mítines y conferencias, para su protección llevaba con él algunos guardaespaldas, mas tarde encontré a dos de ellos en Paris y estuvieron muy mezclados en nuestras vidas.

La noche del 18 de Julio del 36 unos militares llamaron a la puerta de mi abuelo, los visitantes eran además de militares subalternos, militantes socialistas y venían para avisarle de que los militares preparaban la sublevación , debía ser esa noche, se trataba, según dijeron, de los mandos, todos ellos partidarios del fascismo y contrarios a la República.

Mi abuelo no lo dudo un momento, acompañado de los militantes llegó al cuartel y dijo a los soldados que él representaba la legalidad republicana y les ordenó hacer prisioneros a los sublevados, así se hizo, hubo protestas pero los perjuros no tuvieron tiempo de tomar las armas. Así Valencia quedo fiel a la Republica, en gran parte gracias a mi abuelo, ya que privados del apoyo militar los fascistas civiles no se atrevieron a manifestarse hasta después de acabada la contienda, cuando salieron de sus madrigueras para cometer crímenes contra toda la población que fue fiel al régimen legal.

Los militares golpistas fueron enviados a las Torres de Cuarte, convertidas en prisión. Hay un hecho que retrata muy bien lo que fue la guerra civil que llegó hasta el seno de las familias, Entre los militares apresados por mi abuelo estaba Francisco de Castells, el hermano de mi padre y mi futuro tío Paco, personaje que ya iremos conociendo en el transcurso de esta historia. Mi abuelo envió al que era el hermano del novio de su hija a la cárcel, y según cuentan dio orden de que no le pasara nada, así fue, de la guerra mi tío no conoció más que las mazmorras de las antiguas torres.


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